- La infrarrepresentación femenina en la inteligencia Artificial, con un 22% de trabajadoras en el sector, limita las oportunidades, merma su competencia en la empresa y diseña un futuro con parámetros masculinos
- El 45,2% de las mujeres nunca ha ascendido en su trabajo pese a tener las condiciones para ello lo que perpetúa los techos de cristal
FEDEPE, la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias, este 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres 2025, pone el foco en el acceso femenino a los sectores estratégicos del futuro y en la participación en igualdad en la sociedad digital, incluido el acceso a posiciones de máxima responsabilidad, alta dirección y toma de decisiones, sin olvidar la necesaria desaparición de los desequilibrios de género en el mercado laboral que derivan en una precarización del trabajo de las mujeres, abriendo una brecha de ingresos que empobrece al conjunto de las mujeres mientras asumen el doble de carga del trabajo no remunerado.
A pesar de los recientes avances normativos, como la entrada en vigor de la Ley de Representación Paritaria entre Hombres y Mujeres el pasado mes de agosto, persiste una desigualdad estructural en el empleo, y las mujeres continúan siendo mayoría en los contratos temporales y a tiempo parcial, lo que las mantiene en condiciones de inestabilidad y vulnerabilidad financiera. La brecha salarial se ha estancado por encima del 19%, lo que supone entre 5.000 y 6.000 euros menos anuales de media; y alcanza su punto más crítico en las pensiones, donde la desigualdad llega al 36% (por encima del 40% en el caso de las autónomas), dejando a muchas mujeres en una situación económica altamente vulnerable en su jubilación.
El informe «Panorama de Género 2024» de ONU Mujeres revela que, a seis años del plazo fijado para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el mundo no ha logrado alcanzar plenamente ninguno de los indicadores relacionados con la igualdad de género.
Además, las mujeres españolas siguen enfrentándose al techo de cristal. Según el informe ‘Observatorio de la Mujer Profesional en España’ de EAE Business School, el 45,2% de las mujeres nunca ha ascendido en su trabajo, a pesar de que el 37% lleva más de seis años en la misma empresa y el 61% supera los 40 años de edad, factores que indicarían que cuentan con la experiencia necesaria para lograrlo. Esta realidad refleja la persistencia de barreras estructurales que limitan el acceso femenino a puestos de liderazgo y desarrollo profesional.
En el ámbito de la inteligencia artificial y la digitalización, la brecha de género es alarmante. Solo el 26,3% de la fuerza laboral en IA en Europa son mujeres (un 22% en España) y apenas el 29% de los jefes de departamento de IA son mujeres. La falta de diversidad en estos sectores perpetúa sesgos que impactan en la sociedad del presente y en la construcción de nuestro futuro. La subrepresentación femenina en los sectores STEM no solo afecta a la innovación, sino que también limita las oportunidades económicas y profesionales de las mujeres y merma la competitividad de las empresas.
FEDEPE, como miembro de la delegación española en la 69 CSW (Comisión sobre la Condición social y Jurídica de la Mujer) siguiendo la hoja de ruta de ONU Mujeres y de la Plataforma de Acción de Beijing, reclama:
- Medidas urgentes para cerrar la brecha salarial, promoviendo la transparencia retributiva y sancionando prácticas discriminatorias.
- Políticas que garanticen la corresponsabilidad en los cuidados, permitiendo que las mujeres no sigan siendo penalizadas en su desarrollo profesional.
- Acciones efectivas para erradicar la precariedad laboral femenina, asegurando estabilidad en el empleo y reduciendo la temporalidad.
- Inversión en educación y formación en STEM, asegurando el acceso equitativo de niñas y mujeres a sectores estratégicos como la tecnología y la inteligencia artificial.
- Compromiso empresarial para fomentar el liderazgo femenino, asegurando la paridad en la toma de decisiones en todos los niveles organizativos.
- Desarrollo de una IA ética y sin sesgos de género, con mecanismos de supervisión y control que garanticen la inclusión de la perspectiva de género.
- Inversión en políticas públicas de igualdad de género, promoviendo reformas legales que eliminen la discriminación estructural y garanticen acceso a la salud, la educación y la participación equitativa en la vida política y económica.
El liderazgo femenino es clave para la construcción de la sociedad del futuro por su capacidad transformadora por lo que FEDEPE se reafirma en la importancia de garantizar el acceso en paridad a posiciones de máxima responsabilidad y dirección como herramienta de un progreso y crecimiento sostenible.