Con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer #25N FEDEPE se suma a la condena y expresa su profundo rechazo a las diversas formas de violencia que se ejercen sobre las mujeres. La Federación realiza un llamamiento al conjunto de la ciudadanía a actuar en sus entornos profesionales, empresariales, familiares o sociales, como agentes de cambio y a no permanecer impasibles ante ninguna expresión de violencia de género.
Nos estremece comprobar como cada año aumenta el número de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas. Solo en 2023 han sido 52 feminicidios íntimos en España. 1.237 asesinatos machistas desde el año 2003 en el que comenzaron los registros. Pero la violencia de género se expresa de múltiples maneras, y la crueldad del maltratador se extiende a hijos y familiares. La violencia vicaria, es decir cuando el hombre mata a sus propios hijos como castigo a la pareja o expareja, se ha llevado la vida de 49 menores desde el año 2013, con casos tan duros que dejarán cicatrices indelebles en comunidades enteras.
Este 2023 no podemos olvidar tampoco a las mujeres que sufren la violencia de la guerra, mujeres que son víctimas directas o indirectas, y que acarrean a sus espaldas la responsabilidad de hacer que su familia sobreviva, al tiempo que sueñe con un futuro en paz donde se garanticen los derechos humanos.
Vivimos tiempos convulsos, donde la transformación digital, de mano de las recientes aplicaciones generadas por inteligencia artificial, está construyendo nuevas formas de vivir y de trabajar. Es aquí donde debemos alertar y poner el foco sobre la violencia en la red o ciber violencia hacia las mujeres, con marcado contenido sexual y de acoso, y que se ampara del anonimato en demasiadas ocasiones.
Es ahora cuando el factor ético y la perspectiva de género serán cruciales en la programación del universo digital del presente y del futuro. Exigimos que, en el campo de la IA y en la gestión de redes sociales y otras plataformas online, se priorice desterrar sesgos y estereotipos de género que puedan generar el caldo de cultivo sexista de un entorno inseguro para las mujeres y no se tolere ninguna conducta o comentario violentos hacia las mujeres.